Hmm...

     No es ninguna sorpresa escuchar de mi el que suelo sentirme incómoda en lugares donde hay gente que no conozco, y aunque por lo general suelo adaptarme bien -no sin dificultad-, en el grupo en donde estoy ahora me ha costado un poco, es claro, soy una extraña xD practicamente una niñita entre chicos de mas de 25 años, amigos desde que eran liceanos... hmp. Generalmente lo sé sobrellevar hasta cierto punto, digo, son solo 4 horas a la semana divididas en 2, y no todas son vida social, es cantar y todo lo demás, sin embargo hoy me sentí un poco más... mal de lo normal. Teniendo un ensayo tan largo, igual como ayer -estamos ad portas de una presentación 'importante'... y bueh, es que es complicado ignorarlo cuando todos ellos conversan y  echan bromas de las que solo ellos saben, por lo que me limito a cantar cuando me toca y lo demás es mirar las canciones, aunque ya me las sepa de memoria...
            Hoy, en algún punto en que ya me sentía muy mal sentía la necesidad de llorar, y en lo que me aguantaba intentaba pensar en 'Pantuflas rosadas con puntitos de colores', como me dijo una de mis amigas más importantes ♥, pero poco surtía efecto, aunque algo ayudó... y ... pfff, no sé por qué se me vino su cara a la mente... lo peor es que hacía mucho frío, y yo estoy muy acostumbrada a abrazar a mis amigos y amigas... pero ellos, todos apenas conocidos, no me daba ir y abrazar a alguien y bueno, supongo que por pensar en abrazos se me vino a la mente él, y acto seguido me acordé de algo que siempre dice para hacerme sonreír... generalmente me molesta que lo diga, porque viene de algo con lo que me molesta... pero ahora me causó gracia y sonreí... "Imbécil" susurré, y me reí por lo bajo. Mónica, que estaba a mi lado, me preguntó de qué me reía, pero bueno... ellos tienen sus chistes, y que le dijera de lo que me reía no le iba a encontrar sentido... "Me acordé de algo" y ahí quedó.
              Ahora lo pensaba un poco y me dieron ganas de escribirlo, supongo que no quiero que se me olvide, aunque no lo escribí explicitamente, que él y ESAS palabras, son remedio infalible para no llorar... luego no dejé de pensar que me gustaría que él estuviera ahí pero está tan lejos... un abrazo de él me habría caído excelente... pero ese recuerdo me hizo bien, y supongo que es suficiente.